Perfeccionista: dícese del humanoide que aspira a ser un alienígena en el que no habite espacio alguno para el acto de errar.
Errar: tendencia del humanoide medio a equivocarse durante el recorrido de su vida, convirtiéndose en un propulsor de aprendizaje y crecimiento, inherente a la naturaleza falible de la existencia.
Para darle mayor solidez a esta clarificación conceptual, se formulará una sencilla pregunta para que puedas ubicarte fácilmente:
¿Te has equivocado alguna vez?
Si tu respuesta a la pregunta es NO, debes saber que te encuentras dentro de la especie alienígena, siendo característico de esta raza su incapacidad para cometer errores.
Si tu respuesta a la pregunta es SÍ, has de saber que te encuentras dentro de la raza humanoide, especialista en equivocarse, cagarla, volver a equivocarse e incluso hacer una súper cagada de su cagada.
Su capacidad para errar les convierte en seres reales, con opciones de mejora y superación, por lo que cuando consiguen dejar de juzgarse por tropezar alguna vez que otra con su piedra favorita, se les abre un universo incalculable de posibilidades, con las que poder experimentar la gloria del error, que no es otra que la de aproximarse a la mejor versión de sí mismos, pues sólo a través de la guía del error apropiado y la disposición firme para aprender de él, se logra acercar posturas entre nuestro YO REAL y nuestro YO IDEAL.
-Equivocarse es una de las acciones más humanas que existen, y paradójicamente de las más castigadas por nosotros, pues nos juzgamos con desdén cada vez que erramos. Ser conscientes de las potencialidades que puede despertarnos un “buen error” es el primer paso para ganar en benevolencia con nosotros mismos y nuestros errores-
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